Cada vez menos cabinas telefónicas admiten monedas. España es uno
de los pocos países en el que todavía no está muy extendido
el uso de tarjetas. Parece extraño, porque siempre nos quejamos de que
las cabinas no devuelven cambio. Por tanto, para evitar manejar calderilla y,
sobre todo, para que nadie se quede con parte de tu dinero en cada llamada, es
aconsejable que adquieras una tarjeta por el valor que pienses gastar. Ten en
cuenta que la parte que no consumas se perderá al abandonar el país,
ya que cada compañía comercializa sus propias tarjetas. En general,
se venden en kioscos y oficinas de correos. Si te quedas sin dinero y necesitas
llamar a España a cobro revertido puedes utilizar el servicio de Telefónica
denominado España Directo. Consulta en el número de información
de telefónica cuál deberás marcar desde tu destino. Por desgracia,
hay cabinas por todo el mundo cuyo estado de conservación deja mucho que
desear. Además, te encontrarás más de una en la que la ranura
por donde se introduce la pasta está manipulada para que las monedas se
queden enganchadas. La mejor manera de impedir que te estafen es probar, con una
moneda de poco valor, que el funcionamiento de la máquina es el correcto.
Así, si está trucada no perderás mucho.
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En la sección de Páginas Blancas de la web de Páginas amarillas
encontrarás los prefijos telefónicos de cada país, las
zonas horarias en las que está dividido el mundo y el dominio en Internet
que corresponde a cada país.
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