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El
cambio
Desde la entrada en vigor de la moneda única, viajar por la
zona Euro ya no es un problema. Ya no hay que pagar abusivas comisiones
por cambiar divisas cada vez que llegamos a un nuevo país. Doce naciones
(Alemania, Austria, Bélgica, España, Finlandia, Francia, Grecia,
Holanda, Irlanda, Italia, Luxemburgo y Portugal) componen esta unidad. En
cuanto al resto del mundo, las entidades bancarias ofrecen mejores condiciones
que las pequeñas oficinas de cambio que encontrarás en tu
camino. Antes de llevar a cabo la operación, consulta al menos en
un banco y una oficina de cambio la cantidad exacta de moneda local que
te darían (comisiones y similares incluidos) por la suma de que dispongas
en otra moneda. Después, sólo queda seguir preguntando en
mil puntos más o aceptar el más favorable de los dos tipos
de cambio que te hayan ofrecido al comienzo. Otra opción es utilizar
la tarjeta de crédito o débito para retirar dinero
de los cajeros automáticos.
Esta suele ser la mejor, ya que a la operación se le aplica el tipo
de cambio del día para añadirle un 4% de comisión con
un mínimo de 2,50€. Estas condiciones pueden variar entre entidades
financieras, pero al menos es posible conocerlas antes de iniciar el viaje,
lo que ahorra sorpresas y disgustos. Para terminar, ten en cuenta que determinadas
divisas no tienen valor fuera del país en el que circulan. Trata
de que no te sobre demasiado dinero en monedas débiles. |
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¿Cómo se puede disponer del dinero?
Viajar con dinero en metálico es la apuesta más arriesgada.
Es cierto que te permitirá no depender de bancos, tarjetas, comisiones,
engaños y oficinas de cambio, pero te expones a perderlo o a que
te lo roben, lo que supondría el final prematuro de la aventura.
Así, la mejor y más segura opción para disponer de
tu pasta en casi cualquier país son las tarjetas de crédito
y débito. Con ellas puedes realizar pagos sin necesidad de
manejar grandes cantidades de dinero en efectivo y dan la posibilidad
de retirar billetes en los cajeros automáticos (ATM, Automatic
Teller Machine) según lo vayas requiriendo. Antes del viaje, acércate
a la entidad emisora de tu tarjeta e infórmate sobre sus condiciones
de uso y validez en el extranjero. Si viajas con una internacional tipo
Visa o MasterCard no será complicado encontrar un cajero
automático en el que retirar tu dinero. En la página web
de MasterCard (www.mastercard.com)
puedes localizar (ATM Locator) en pocos minutos las direcciones de todos
los cajeros de la red en el mundo. El único inconveniente de estas
tarjetas es que si las pierdes o te las roban puedes tener algún
problema para continuar el viaje normalmente. En ese caso, lo primero
que debes hacer es dar parte del robo o pérdida a la compañía,
que inmediatamente la cancelará de manera que nadie pueda utilizarla
fraudulentamente.
El número de teléfono al que debes llamar (es gratuito) para
anularla cambia según el país en el que te encuentres. Solicita
en la entidad emisora los de aquellos países que planees visitar
y apúntalos en un lugar seguro y nunca junto a la tarjeta. La gestión
de una nueva suele llevar una semana, algo que no debería preocuparte
si tienes fondos, ya que se te adelantará el dinero que precises.
Por último, hay gente que recurre a los cheques de viaje (traveler´s
checks). Se trata de una forma segura pero engorrosa de llevar el dinero.
Todos los bancos pueden proporcionártelos a cambio de una comisión
del 1-2%. Básicamente, debes comunicarles el montante total de dinero
que deseas llevar y ellos lo convertirán en cheques de diferentes
valores. Una vez en el país de destino, podrás acudir a cualquier
entidad bancaria y solicitar que los conviertan en metálico. A cambio,
se cobrarán una comisión y podrás marcharte con tu
dinero contante y sonante. El mayor inconveniente llega cuando los pierdes
o los roban. Según las compañías emisoras, en 24h los
anulan y reemplazan por unos nuevos, pero en la práctica suelen poner
pegas para reponerlos, sobre todo a mochileros y gente joven. En cualquier
caso, si puedes, combina estos tres sistemas (metálico, tarjeta
y cheques de viaje) o al menos dos de ellos, y tendrás menos posibilidades
de quedarte en la estacada. Pocas veces falla todo a la vez. |
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