Tanto cultivar como vender marihuana es algo que está prohibido en Suiza. No obstante, el país ha tomado la decisión de poner en marcha un plan de prueba con el que quiere experimentar para ver si eso mejora el estado de la región en base al consumo de esta droga.

Bajo este plan de prueba, varios cientos de personas recibirán autorización para poder llevar a cabo la compra de marihuana para uso recreativo en las farmacias de la ciudad de Basel. Dicen desde la oficina de salud del gobierno que su intención es probar modelos de regulación alternativos que les den la posibilidad de explorar distintas vías alternativas.

El problema actual es que, en el país, hay un mercado negro muy activo. Se venden grandes cantidades de marihuana y se cultivan todavía más. Llegada a esta situación, lo que quiere Suiza es tener una forma alternativa de controlar este consumo para que, al menos, pueda haber unos niveles de control tanto de la calidad como del volumen de uso que llevan a cabo los ciudadanos.

Por otro lado, en estudios recientes se ha comprobado que el público de Suiza está abierto a que se reescriban las leyes relacionadas con el consumo del cannabis. El gobierno está estudiando la viabilidad de este tipo de soluciones, la implantación de otro tipo de normas y si será algo que tendrá un efecto positivo en la sociedad.

Para explorar estas alternativas, Suiza también se ha fijado en los cambios que han llevado a cabo otros países en relación al consumo de marihuana. No obstante, está claro que Suiza tendrá que ser muy cuidadosa con la forma en la que aprueban el cannabis para uso recreativo y estar al tanto de los efectos que esto tiene entre los consumidores. ¿Tendrá un efecto positivo o uno, en realidad, negativo?

Artículos recomendados