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Sólo el 12,7% de los adolescentes que mantiene relaciones sexuales utiliza un anticonceptivo fiable Abc - 16/12/2003

Los jóvenes cuentan con más información que nunca sobre métodos anticonceptivos, pero la tasa de embarazo y aborto entre las adolescentes españolas sigue aumentando. Cada año se producen 18.000 nuevas gestaciones en menores de 20 años, el doble de las que se producían hace una década. Se trata en su mayoría de embarazos no deseados, como demuestra que más del 40 por ciento terminan en un aborto. El Ministerio de Sanidad presentó ayer un estudio, entre chicos y chicas de 15 a 17 años, que confirma las actitudes de riesgo de los adolescentes en sus relaciones sexuales. El «Estudio de conductas para los escolares relacionadas con la salud» refleja que sólo el 12,7 por ciento utiliza algún método anticonceptivo considerado fiable. El resto, el 87,3 por ciento, confiesa que, o bien no utiliza ningún método (12 por ciento), o no era fiable (0,3 por ciento). Un dato revelador es que el 75,4 por ciento de los encuestados no contestó a la pregunta, lo que hace pensar a los autores del sondeo que ni siquiera les preocupa. Dos tercios de los adolescentes habían mantenido relaciones sexuales con una sola persona, pero un 35 por ciento había tenido relaciones con más de una persona, grupo en el que se registran las tasas más altas de embarazo. Según el mismo estudio, auspiciado por la Organización Mundial de la Salud, el porcentaje de embarazos se sitúa en el 3,3 por ciento entre los que mantienen relaciones sexuales (25 por ciento de los adolescentes), frente a la tasa general del 0,84 por ciento, en los que se incluyen los jóvenes que no mantienen relaciones. Los resultados se han obtenido, con absoluta confidencialidad, y tras analizar las respuestas de una muestra representativa de estudiantes de todo el territorio nacional. Este estudio ha sido un acicate más para que Sanidad presentara ayer una nueva campaña de salud pública, la sexta desde que Ana Pastor preside este Ministerio. Con el lema, «Hablar es otra forma de prevenir embarazos no deseados», Pastor presentó una campaña que rompe con las iniciativas tradicionales. Hasta el próximo 25 de diciembre se emitirán anuncios en cadenas de televisión, emisoras de radio, etc., con el actor Antonio Resines en el papel de padre que intenta hablar con su hijo sobre la necesidad de utilizar métodos anticonceptivos. Pero sin especificar cómo hacerlo o qué medida tomar. «Es una campaña políticamente correcta que deja en manos de los padres la decisión de cómo hacerlo. Cada uno debe actuar según su conocimiento y su forma de pensar y entender la vida», dijo Resines. La idea era elegir la figura de un padre para que también ellos se impliquen en el problema y a un actor «que conecta muy bien con el público joven», dijo la ministra. Pastor explicó que su Departamento no podía permanecer impasible «ante la transcendencia de la maternidad y las serias consecuencias que este hecho tiene para el proyecto vital de un joven». La campaña se centra en la falta de información porque todavía «es el factor más importante que provoca un embarazo no deseado, «y la mejor forma de prevenirlos es implicar de forma activa a los padres». No obstante, insistió en que se trata de un problema que «necesita un enfoque global» por lo que también se trabaja con otras instituciones y con las Comunidades Autónomas para frenar el aumento de embarazos entre adolescentes. Aumentan los abortos en España Paralelo al incremento de embarazos no deseados se produce un aumento de las interrupciones voluntarias. Aunque ayer Sanidad no avanzó los nuevos datos de interrupción voluntaria de embarazo, a punto de darse a conocer, el director general de Salud Pública, José María Martín Moreno, aseguró que antes de que termine el año se harán públicos, pero adelantó que la tasa de abortos ha vuelto a aumentar. Sanidad está evaluando la proporción de interrupciones voluntarias de embarazos entre la población emigrante, así como de embarazos no deseados. Julia González, subdirectora de Salud Pública y Promoción de la Salud, aseguró que este análisis se realiza por tratarse de una población más sensible y con un índice de fecundidad más alto que el del resto de la población general. González también avanzó que los próximos datos que se están analizando muestran un aumento mayor de interrupciones voluntarias en el grupo de mujeres de entre 20 y 35 años.